lunes, 1 de diciembre de 2008

Corazones rotos


Cuando hablamos de corazónes rotos, ¿estamos pensando que son de vidrio? ¿o de cerámica? ¿De qué material tendrían que ser los corazones para no romperse? ¿hablamos de amargura y soledad?

Haciendo un recuento histórico-espiritual ya perdí la cuenta de cuantas veces me han roto el corazón... y como de lo malo me trato de olvidar... nunca llevé la cuenta de cuantos corazones he roto... jeje...
El corazón no solo se rompe con novios/amantes/esposos y otros.. sino también con amigos, parientes... y mas de algún desconocido.

Por ejemplo, recuerdo una caricatura de Mafalda, donde está intentando descifrar dónde ponerse una curita, luego de ver a un par de niños harapientos pidiendo limosna...

¿Qué te rompe el corazón?
¿Qué es lo que te hace llorar?
¿Qué es lo que te decepciona y te deja cansado?
¿Qué es lo que te hizo pensar que nada vale la pena?

En la naturaleza humana está el errar, yep! Erramos: el camino, la carrera, la pareja, el "modus vivendis", los amigos, los sentimientos... erramos.

Cuando nos damos cuenta del error cometido, con horror, nos damos cuenta: nos han roto el corazón (again). Pero ¿será que el corazón del que hemos sido provistos... tiene un mecanismo de auto-arreglo? ¿ha habido una "pega loca" lo suficientemente eficaz para salvar a esta máquina de bombeo sanguínea? No lo sé... lo que sí sé (a ciencia cierta) es que si nos quedamos con el corazón roto... volvemos a errar.

Y en verdad, no hay víctimas ni victimarios, en esto del amor (cualquiera que sea su dimensión) es tan fácil ser persona... y lo olvidamos rotundamente, rompemos y nos rompen el corazón, el mundo es cruel y no cree en el amor... eso es lo que nos hacen creer, eso es el objetivo final, mantenernos a raya. Fuera de todo sentimentalismo nos vemos rodeados de malas influencias que desestiman la naturaleza humana. Somos hechos para el amor... y el amor básico, con el que inciamos a amar... es el amor propio.

El corazón deja de romperse cuando nos damos cuenta e interiorizamos que no todo tiene que ser perfecto, que tenemos malos días pero también días hermosos y bellos, que hay otras opciones al rededor más que la falsa vocación de mártir, que uno puede vivir sin algunas personas perfectamente y mejor aún... que existe eso que se llama "bendiciones" y que estamos rodeados por ellas, solo que nos hacemos los locos... el corazón deja de sufrir y recibe nuevamente llamadas, lee mensajes con alegría, limpia recuerdos, hace lugar para nuevos amaneceres, se atreve, camina tranquilo y admira el dia, por mas oscuro que sea y, sobre todo, un corazón ha dejado de sufrir cuando canta desaforado.

Merecemos un corazón feliz, ¿o no?... merecemos que arda con el ímpetus de la libertad, libertad obtenida del amor propio... para amar a otro... y no andar rompiendo corazones nunca mas.

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