sábado, 7 de julio de 2012

I'd lie for you... o de por qué no me agradan los protagonistas

Anoche estaba pensando que por lo general, cuando leo una historia, o veo una película o veo un vídeo, termino fijándome en algún personaje que no es el principal. 

Por ejemplo, en Billi Elliot... me llama mucho la atención su maestra de ballet... en Los Cazadores del Arca Perdida... Sean Connery hace lo suyo... en La Casa de los Espíritus, Miguel me robó el corazón... y así, puedo seguir citando ejemplos y resulta que me gustan mucho los personajes secundarios. Hay algo en ellos que es más cálido, real y certero a la hora de ver la luz.

Todo esto lo empecé a ver en un vídeo... allá en los inicios de 1993, cuando iba aterrizando a los 15 años. De repente, no me acuerdo en qué canal de televisión, seguramente habrá sido el 6... vi este vídeo y entonces... me enamoré. 



Porque es bien fácil ver que el protagonista, una copia bien remasticada de Indiana Jones, no lo es, se la lleva de sanvergón y el verdadero protagonista es el pobre hombre que encarna Meat Loaf, ese que le caen puteadas, le llueven balas, se cae, se ensucia y ve con ojos de amor a la bicha pasmada que siempre está esperando a que la salven. ¡Qué gana la de esa tipa de estar en apuros! además de ser bastante inutilita como para poder defenderse sola, pero eso es aparte. 

Pensaba, en 1993 y ahora también, que si es cierto que ha ser chivo que la rescaten a una, pero también pensaba que es bien fácil que a una la deslumbre algún tipejo con buena pinta y pienso en los hombres que van por la vida sin pena ni gloria, bastante ignorados por la cámara, relegados a "segunda opción" y digo que  es bien injusto, hasta que sucede... algo cambia y el personaje secundario obtiene una recompensa por su participación en la historia.

No me hagan caso... es eso o que que a veces me he sentido como personaje secundario o que simplemente me gusta la canción. 

1 comentario:

Clau dijo...

Actriz/Actor de reparto le mientan, creo yo.
Destaca, pero no se roba el show.