jueves, 25 de febrero de 2010

Señales de alarma

Hay momentos en los que me doy cuenta que no estoy durmiendo ni lo que debo, ni como debo. Esta semana, luego de dormir 12 horas el sábado, al parecer mi mente me está pasando factura, tengo cinco noches de dormir una o dos horas diarias, abonando a esto el hecho de que cuando logro dormir me invaden las pesadillas.

Necesito ordenarme, en serio.

La Dra. Garay, cuando estaba en tratamiento, siempre me decía: "tenés que estar atenta a lo que te rodea, tu misma rutina, tu mismo entorno y modus vivendis te va ir diciendo cuando necesites desconectarte", así que por salud mental, empecé a hacer una lista de aquellas "señales de los tiempos" que me indican que tengo que hacer algo efectivo y rápido por recuperar el ritmo de sueño y descanso.

Hoy, hace unos minutos fui conciente de varias de estas señales que ya empezaron a aparecer:

1. Empiezo a alucinar: no crea el amigo lector que toda mi vida es una alucinación... no, simplemente son imágenes que se aparecen al margen de mi rango visual, pueden ser personas, objetos... la explicación de mi doctora es que se tratan de recuerdos fugaces retenidos por mi disparatado cerebro que saltan a mi conciente para "limpiar la memoria".

2. Llego a la cama y caigo redonda, como si me dispusiera a dormir durante días completos, es tanta la pesadez que ya he llegado al punto que ni siquiera me saco los zapatos, solo me tiro a la cama y (a veces) logro echarme una cobija encima... no me cambio, no me quito los aritos, ni los zapatos... quince minutos más tarde ya estoy despierta y de pie.

3. Me da hambre a cualquier hora, estoy hablando de un hambre monumental, digna de destazar algún bovino e ingerirlo sin mayor problema, dice la sabia doctora que es por la inversión de energía de mantenerme despierta.

4. Me pongo la pijama a las 8 a.m. Con esta señal es que empiezo a afligirme.

Me acabo de poner la pijama. :(

No hay comentarios: