sábado, 22 de noviembre de 2008

Ejercicio

Nunca he considerado que sea una persona sedentaria... no tanto al menos... Guechos! no soy sedentaria... ando para arriba y para abajo. Sin embargo, creo que tener una vida activa no quiere decir que haga ejercicio... alguien me dijo que no cuenta como ejercicio el correr cada mañana... detrás del bus...

Esta semana (solo esta semana!) he escuchado a cuatro personas que han entrado a un gimnasio... expresiones como: "ya me hacia falta una sudadita", "es que estoy bien panzón", "es que hay que cuidarse para que el marido siempre la vea a una bien bonita"... son las justificaciones que he escuchado.

Sé que es importante estár en buena condición física por salud, pero hay mara que exagera y se desvive por tener una apariencia fina y estilizada (en el caso femenino) o fuerte e impresionante muscularmente (en el caso masculino), sin embargo también hay una gran población que se da a la tarea de incrementar sus niveles de trigliceridos y colesterol en la sangre... a puro engorde constante y conciente.

En este mundo polarizado, tan extremista... creo que yo estoy en medio, no, no voy a un gimnasio, pero no le hago mala cara a caminar a diario y cuando hay oportunidad me gusta subir algún cerro mal puesto por ahi... pero al parecer no es lo socialmente suficiente. "Deberías ir al gym" se dejó escuchar una voz (y no era el de mi conciencia)... con el siguente complemento... "te vas a poner bien rica". Bien rica... ¿qué es estar "bien rica"? Según lo que pude entenderle a la persona que dijo esa serie de palabras, es estar en las condiciones "estéticas" para ser receptora de miradas masculinas (y mas de alguna femenina también).

¿Es valido el ejercicio por razones estéticas? ¿dónde quedó la dimensión de la salud? ¿porque esta persona es tan desfachatada para hacer esta aceveración? ¿a caso no estoy rica ya? (jeje) son las preguntas que me surgieron... también recordé el comentario de una amiga... "me siento mejor, luego de rebajar... pero no quiere decir que estar gordita es ser fea". Me hizo concluir que el ejercicio imprescindible es el de la autoestima... sentirnos hermosos no redundará en las libras que pierdas, ni en el nivel de suduración en un "gym", ni en las frituras de la diana, ni en el budín de la tienda... (ese que llevan en la tarde...uf!)

Mientras tanto, me enteré... he subido cinco libras desde la última vez que me pesé...

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