Son las que escribo y que dejo en el folder de "borradores" en el mail. Eternamente aprisionadas para que no te enteres de lo que me acontece.
Si... yo sé... ¿para qué las escribo entonces?
No lo sé... quizá sea que siento una gran paz al terminar de escribirlas y al leerlas... y pensar en tus ojos leyendo las mismas letras que salen de mis manos... al final son cartas para nadie, porque no son para ti, no son para el que se fue ya, ni para el que venga... todos son tan distintos y mi corazón es un caprichoso de primera.
No me regañes... déjame escribir cartas para nadie... a lo mejor mas adelante puedan mutar y convertirse en un libro, en un poema, en un cuadro, en una canción... en un pájaro.
Tal vez, bajo el amparo de un milagro... puedas leer una, luego mirarme a los ojos, abrazarme y darme un beso... y yo te escribiría una postdata en tu espalda.
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