Soy una renegona!!!
Soy inconsecuente a veces y un poco habladora... me quejo de más y a las heridas me gusta verlas abiertas para recordar cómo cuidarme para la próxima.
Reniego de las circunstancias y del mal tiempo (que por lo general, es el buen tiempo del resto de humanos), me caen mal las multitudes y me atosigan los arrumacos. Me quejo de mis dolores y (después de la terapia) ha sido peor, porque me creo muy digna de ser habladora. Cuando de repente... alguien, por casualidad, sin ganas de joder, me recuerda eso que es tan valioso, esa virtud que me cuesta tanto, que a veces creo que ni la practico, sino que la finjo... la humildad.
Anoche estuve conversando con muchas personas, no al mismo tiempo, pero para una sola noche fue suficiente... me regañaron, me agradecieron buenas noticias, me sorprendieron con buenos chistes, me presentaron mas personas, me dijeron: "Tenes mucho que dar". Me dio miedo y ante mi miedo me reviraron: "Si vivís con temor, no vivís"
Y quiero ser valiente, quiero practicar la humildad y la franqueza sin dolo, quiero reír y poder llorar cuando me de la gana, sin que me interrumpan, o que me miren con frialdad, quiero sentarme a conversar sin detenerme, durante horas y horas, con los nuevos amigos, quiero sentarme a parir ideas y poder servir de algo, quiero elevar una oración sincera. Quiero escucharlo sin reservas. Quiero manejar la negatividad (propia y ajena), poder ver a rostro de quien me remacha los errores y decirle: "Sabes? no me importa, no viene a cuenta, podes dar por terminada esta conversación". Quiero poder dar un abrazo y un beso con todo el amor que tengo dentro de mí, con toda mi fuerza y con toda mi debilidad.
Hoy es hoy... y hace dos años jamás hubiera pensado que estaría donde estoy. Gracias.
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