Ah... los "ex's"... siquiera habláramos de "ex-mens" de la caricatura, pero no... son esos hombres que forman (tristemente) parte de la vida de la mayoría de mujeres en este planeta.
Ni yo con mi "encanto desbordante" me salvo de tener "exes". u_u. Por suerte y siendo la que soy... los ex´s se van al olvidado mundo de mi anestesia selectiva. Solo uuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuno puede decir que no pertenece a ese mundo y que (de alguna manera) todavía tengo cierto contacto con él... uuuuuuuuuuuuuuuuuuuuno.^^
¿A qué se debe entonces el título de este post?
Resulta que justo cuando ando más tranquila, cuando me siento cómoda en mi relación solitaria conmigo misma, empiezan a surgir los ex's. ¿Tendrán radar digo yo? Pero así "Heavymente" como dice Carmen María... y en este contexto contaré dos pasadas recientes:
1. A él lo denominaremos "el primero", porque de hecho fue el primer muchacho al que dejé que se acercara y pretendiera ser mi novio, aunque "legalmente" nunca lo fuimos. Le llamaremos así por efectos de su anonimato y además que tiene un nombre horrible.
Ahí estaba yo, me había tirado a la grama de la cancha porque me dio un calambre de los mil demonios por correr sin calentar, llevaba una semana de ir al estadio tarde a tarde a tratar de perder un par de libras indecentes. El asunto es que ahí estaba yo, tirada tal cual lagartija retorciéndome del dolor y amarrándome el zapato izquierdo (que sabe el universo por qué diablos siempre se me desamarra) cuando sentí que alguien se detuvo de su lenta marcha fingida de quiero-ser-delgado-de-nuevo. Levanté la mirada y lo encontré.... Era él, con 50 libras más de las que recordaba. "El primero"! >_<
Sigue teniendo esa voz que siempre me gustó... así como ronco pero no tanto... "Hola" dijo él y yo contesté alguna tarugada que no recuerdo en este momento. Me dio la mano para ayudarme a ponerme de pie y me dijo "caminemos juntos". Se imaginarán ustedes a esta treintona caminando junto al treintón....ambos en shorts, camisetas y tenis... es el peor encuentro que he tenido (mentiras, he tenido peores) y empezó el interrogatorio... ¿ya te casaste?, ¿y ya tenes hijos?, ¿dónde trabajas?, ¿desde cuándo venis? ¿y qué contas? Ocasionalmente preguntaba algo yo y me quedaba en ese silencio tan torturoso que no me gusta. Por supuesto, él me contaba de su vida en esos momentos de silencio míos. Su hija tiene 10 años, trabaja en el mismo lugar de siempre y... ya no recuerdo qué más. "Es primer día que vengo a correr, unos amigos me dejaron bajado, pero qué bueno encontrarte, si "aquellos" se rajan ya tengo con quien correr".
Resumen: no volví a ir al estadio desde ese día.
2. A él lo denominaremos "el raro". Lo conocí hace como 5 años, en el museo donde yo trabajaba y él era el diseñador gráfico que plasmaba mis ideas en cuestiones de impresiones. Realmente no recuerdo por qué cortamos, en fin... era raro y yo rara... no perduró. Un día dejamos de vernos y ya. Yo me fui del museo, una amiga en común me contó a los meses de ser libre de esa prisión, que él también había renunciado de la imprenta donde lo conocí y así.
Con este mi nuevo trabajo, que me obliga viajar hasta el otro lado de la ciudad, pues me obliga abordar rutas que había dejado de frecuentar desde que me fui a Guate el año pasado.
Yo que me subo a la mortal 44 y tas, que en la siguiente parada se sube él, imposible de no verlo, yo iba en el tercer asiento. Pasó a mi lado y me vio con desprecio y desdén. "Ve chis!" me dije a mí misma. Pasó.
Pero al día siguiente, en una hora muy distinta a la anterior ocasión, igual, abordo la 44 y tas... que en la siguiente parada se vuelve a subir él >_<. Pasó de nuevo.
Pasaron dos días y de nuevo, misma ruta, mismas paradas... y a la tercer fue la vencida. Como en esa ocasión el bus iba más desahogado, se sentó a mi lado. "Hola" me dijo y yo contesté con cortesía, haciéndome la que no lo había visto... "No sabía que me andabas siguiendo" WTFFFFFFFFFFF!!!!! ¬¬
Tuve que tragarme lo primero que se me ocurrió contestarle por no parecer loca. ^^
Fueron de los 30 minutos más largos que he vivido, hasta que él se bajó frente a la UCA. *Respiro de alivio* En esta ocasión ni recuerdo qué me dijo, ni qué le dije. Borré cinta como dice un maitro por ahí.
Resumen: No me gusta encontrarme con "ex's". Es bien incómodo. En verdad en verdad os digo... aunque he usado siempre la política de no hablarles, ni verlos nunca más, siempre he pensado que lo pasado, pasado. Y espero que ellos ya hayan dejado de pasar por donde yo paso.
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