Tal vez ya lo he mencionado en algún post... tengo esa impresión.
Tengo un amigo... se llama Nelson. A él lo conocí en mi anterior trabajo, es un hombre casi casi de 27 años, de casi 2 metros de altura, algunas mujeres lo clasifican como guapo y bien buena gente.
Mi amigo en cuestión aparece y desaparece, como suelen hacer los mejores amigos. Recuerdo el día que lo conocí, me pareció un niño grande, de hecho si lo es, pero al sobrepasar el silencio, luego la bayunquez superficial, este hombre tiene un sentido del humor bien perspicaz y ha pasado historias que lo han ido forjando como la persona valiente que es.
De broma en broma y sin darnos cuenta establecimos la costumbre de salir cada dos o tres semanas, a veces vamos a cenar o a tomarnos un café, hablamos prácticamente de todo: del trabajo, de lo que nos gusta y lo que odiamos de la fundación, de algunos compañeros (con cariño y consideración, no en tono de chambre) de su enamoramiento de cierta señorita y de mi status Cro-magnon emocional... de su divorcio, de mi estadía en Guate, de su hija, de mi sobrino... pero fundamentalmente hablamos de esa manera franca en la que los amigos hablan, sin miedo y sin pena. Él expresa sus dudas a cerca de las mujeres, yo trato de resolvérselas. Yo desportico contra alguna clase de hombres, él trata de hacerme recordar que no todos son así.
De alguna manera bizarra esta es la relación de amistad más equilibrada que tengo con un hombre, porque seamos honestos.. no tengo relaciones equilibradas con los demás, no se crean que son muchos, serán dos o tres nada mas, pero que son desequilibradas, son desequilibradas.
¿Por qué escribo de Nelson ahora? No... no es su cumpleaños, sino porque anoche, mientras hacía berrinche con otro amigo sobre cuestiones laborales, caí en la cuenta que Nelson no había dado señales de vida desde que vimos la campaña de MD que me dejó asqueada... le mandé un mensajito de "estás vivo?" e inmediatamente me dijo que si. Sigue vivo. ^^
Le comenté anoche que este tiempo "pre" (pre-electoral, pre-navidad y otros tantos pre's) está siendo raro, mucho trabajo, mucho que hacer, muchas dudas, muchos acontecimientos y él que me conoce y que osa en burlarse de mi mal humor y disfruta de mi encanto natural de mandar todos a la m... me dijo algo que a pocas personas se lo reconozco como cierto... "No te preocupes...todo saldrá bien, además, si queres filosofar... aquí estoy".
Contar con la gente es bien difícil para mi... pero él ha sabido ganarse mi confianza desde la mañana en la que me dejó llorar todo lo que quise luego de una mala noticia. Quizá por eso o porque es tan fácil reír con él... para mientras... ya acordamos el próximo encuentro ^^
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