sábado, 9 de octubre de 2010

Nostalgias también golpeadoras

Y es que me diga... "Tía... ¿cuándo vash a minir? yo shtoy trishte porque no venis... no me contás los tres coshinitos" me deja con el corazón deshilachado!

A usted, mijo... lo extraño también... mi corazón se me estruja cuando me dice "guenas noshes tía... jejeje... no cuedo darte beshito, pero te lo voy a guardar para cuando volvas"






Este mi sobrino es un atentado a las emociones

2 comentarios:

Clau dijo...

Imaginate fuera tu hijo...por eso las mamás sentimentales no aplicamos a becas ni aceptamos trabajos lejanos.

Aproveche ahorita niña, dele la vuelta al mundo =)

KR dijo...

Jajajajaja.... ay no... si yo me puedo... ya me "sé" como decía mi abuelita... si tuviera hijos no estuviera aquí... estuviera haciéndole ovarios allá con ellos, queriéndolos de más y contándoles muchos muchos cuentos, escribiéramos historias en las paredes de su cuarto, platicaríamos con las plantas, le pusiéramos nombre a las nubes y además adoptáramos a todo aquel indefenso animal que se nos pasara enfrente... cocináramos cada sueño para comérnoslos con vasadas de fresco de tamarindo. Los prepararía desde bien pequeños para viajar ligeros de equipaje y les daria banderillazo libre para que agarren una mochila y se marchen a ver lo que yo no pude ver por estar viéndolos crecer. Sé que sería muy feliz.

Si, trato de aprovechar, y no se imagina la laaargaaa lista de lugares que quiero ir a conocer... pero dos cosas me lo impiden... falta de presupuesto y falta de alero... jejejeje