Odio los domingos, no sé... me parecen tiempo muerto, como que no quisieran existir en realidad... se tornan como una pintura abstracta y a más no haber... en surrealista, cuando empieza a caerme bien... pero igual... es un día tan incomprensible para mi, con ansiedad espero su fin, me parece muy cabrón y falto de tacto...
Unos odian el lunes, otros no se atreven a enfrentar el martes... pero mi odio personal es para el domingo, purulento y desagradable, por eso... trato de hacer muchas cosas ese día, mantenerme ocupada para no sentir cada uno de sus 1440 minutos y salvarme así de él y su desfachatez mal puesta.
En domingo puedo decir: te detesto, me caes mal, podés agarrar todas tus cosas e irte al infierno, no te necesito, "maldigo el día en que naciste" y tantas otras frases cliches propias para la furia desgarradora de la que es capaz mi ser... puedo decirlas en domingo... puedo decir que odio a todo el mundo durante tres horas en día domingo... por lo general de 2 a 5 p.m. Puedo... podría... pero siempre me trago esas frases y otras más y termino odiando aún más este maldito día.
Para mi, este día no tiene lógica, ni fundamento, no tiene gracia ni objetivo... Odio los domingos.
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