El extraño mundo de los almacenes...

Ayer les platicaba sobre la coquetería y la malicia.... para seguir con la serie "tratando de ser una mujer normal" les cuento mi incursión de día de compras.

Ni modo, la vestimenta es uno de esas necesidades que tengo que suplir, aunque mi carencia de "tierra" me diga que hay cosas más importantes que la imagen ya no puedo andar por la vida con mis camisas remendadas o mis camisetas flojas... así que luego de un arduo trabajo de conscientización me fui de compras... por supuesto... sola.

¿¿¿¿Qué pasa en este retorcido mundo???? Desde cuando la talla 6 pasó a ser la 4 y la 8 es la nueva 6???

Había dicho que quería comprarme un vestido. Sisisisisisisi.... sigo siendo yo... solo que con las piernas al aire... a pues, un vestido... un vestido lindo, no largo, no micro vestido... un vestido a secas... pasé casi 40 minutos viendo vestidos ir y venir y nada... ninguno me gustaba... hasta que apareció! Precioso... ingrimo en su blancura absoluta, de tela fresca y voluble... precioso... lo codicié.

-Señorita.... quiero probarme este vestido, pero lo necesito en talla 8 (yo recordaba que la última vez que compré un vestido era talla 6, pero como estoy mas gorda desde aquella vez, le aumenté una talla pa ahorrarme la frustración de ver que no me entrar la talla 6)

-mmm... pero mire... yo creo que la talla 8 no le va a quedar... yo le calculo que es una tall 6 (esta mujer si que sabe, pensé) pero le voy a traer las dos tallas para que usted decida.... (buena vendedora)

- ta bueno... tráigalos.

Diez minutos después salí del vestidor con los vestidos y con una seria pregunta en la mente ¿Qué pasa? Me probé el talla 8... parecía carpa de circo... fuera... no queda... a ver el 6... menos carpa de circo, pero flojo, me sobraban como "tres dedos" a los costados... Qué raro!

-¿Le quedaron?- preguntó la señorita vendedora

-Fijese que no... 

-¿grandes?

-si...

-¿le busco la talla 4?

-Ta bueno...

No puede ser que sea talla 4... he rebajado como cinco libras desde que regresé de Guate y esa pérdida de libras no justifica el cambio de una talla. Pero bueno... talla 4

Recordé cuando la Dra. Allwood, cuando trabajaba en el museo me insistía en que tenía que llegar a la talla 2 (petit que le mientan), si supiera que ahora me están buscando un vestido talla 4 se muere de la alegría... me diría... "si mija... ahora ya va sobre el camino encaminado, solo le falta una talla menos y estará lista para conquistar el mundo" ah... la dra!!! tanto aprecio que le tengo... no sabe la viejita que ahora las tallas vienen en hormas más grandes y que la única razón por la cual el 6 no me quedó es porque ahora los hacen más grandes. Pero bueno...

-Señorita... fíjese que le voy a quedar mal... no tengo en talla 4, pero podemos buscarle otro vestido en su talla...

TAS!!!!!!!!!!

-No, gracias, muy amable... 

Me fui, fui a ver las blusas... descubrí que ahora mi color favorito es el gris, vieran que lindo se me ve (^-^), encontré un par de candidatas, pero como mala compradora que soy... las dejé en "veremos"... fui a pulular para tomar una buena decisión y terminé en el departamento de lencería... por supuesto me acordé de aquella pasada de la mujer que andaba con el mari-novio escogiendo lencería... y mientras veía un conjunto en color azul que pensé en comprarme pensé en escribir un nuevo post respecto al tema (coming soon).

Ash... ta bueno, lo admito, las compras nunca fueron mi vocación, pronto me cansé y me fui a un lugar mágico... una librería, pasé como una hora eligiendo los libros que quería comprar... eran demasiado, ahí es donde me ataca la codicia... elegí solo tres (solo dice la ingrata!) los compré, al pagar me di cuenta... todavía no tenía lo que había llegado a comprar... de regreso a la ropa... terminé de decidir la blusa adecuada.... realmente preciosa... la pague y me fui. (¬¬) tengo que mejorar mi técnica de compras... sino me va  seguir pasando que salgo con más libros que ropa del centro comercial.